Moléculas de agua

Los cambios son parte de nosotros. Igual que el agua siempre es agua, siempre son moléculas de H2O pero lo que cambia es su anexión, y así cambia su estado su forma de ser.
Las cosas cambian también, algunas veces a mejor, otras a peor y otras, los cambios son tan mínimos que no se notan hasta que ese mínimo cambio da lugar a otro más grande.
Pero, ¿qué es lo que hace que tengan lugar esos cambios? El paso de los segundos, minutos, horas puede hacernos cambiar la opinión de alguien, hasta llegar al momento en el que la amistad o cualquiera que fuera la relación son simples recuerdos, aunque también pasa lo contrario, que personas que no se lleven con el paso de tiempo encuentren que son unas perfectas amigas.
Lo peor es cuando tú ves que algo está cambiando y quieres parar el cambio pero una vez que se pone en marcha es difícil lograrlo. Es difícil vivir el presente cuando el pasado fue mejor. Pero siempre queda la esperanza de que el futuro supere al presente y al pasado.
Como las gotas de agua, cada una es diferente, única y normalmente suelen buscar a más gotas de agua para formar copos de nieve, nubes, ríos, océanos…
A veces les cuesta encontrar el lugar donde están cómodas porque aunque te encuentres bien en el océano si pierdes una de tus conexiones porque se evapora, pierdes el sentido y tienes que volver atrás para buscar de nuevo tu camino, pero tienes que ser tan valiente como para olvidarte de la gota que quieres y se fue. Siendo tu calcita y esa persona la gota de lluvia… que si te toca te disuelve y te deja sin personalidad, te deja sin ser quien eres.
Y aunque te quiero, estoy harta de perderme poco a poco, sin que te des cuenta, pero el problema es que no sé en qué momento te evaporaste.
Sigo buscando el camino, si ser gota en una nube, si ser gota en un rio, si no ser gota y desaparecer simplemente